12 de noviembre

Me fallé mil veces a mí para no fallarte a ti. Me inventé veinte mil argumentos por los que no dejarte y en realidad sólo eran excusas. Fui contra todos y lo di todo, por mí, por ti, por lo nuestro, por querer confiar, por querer que no acabara algo que ya estaba casi muerto. Que sabía que uno de los dos se iba a quedar más pillado y no te mentía cuando te decía que para mi olvidarte no existía. Que el amor es un sube y baja y los amores de verdad son los que pasan estas cosas, y muchas más. Que yo sería capaz de sobrepasar todo esto porque cada pelea me doy más cuenta de que te quiero a más no poder, mi mente se ha hecho a ti y me da miedo pensar que me va a costar meter a otro en la cabeza, pero a lo mejor esto no es una historia de esas bonitas y de cuento que no tienen final, que no quiero esperar algo que nunca va a llegar dejando pasar cosas que a lo mejor merecen más la pena que tú. Siempre hice las cosas con el corazón, fui de frente y lo aposté todo porque funcionara, te dejé las cosas claras desde el principio hasta el final y tiré de ti y de mí hasta que ya no pude más. Mientras que pasa el tiempo, cada día ando más perdida de donde tienes tus sentimientos. Que espero que nunca me mintieras y que yo siempre fui con la verdad por eso no te puedo decir, aunque me gustaría, "que te vaya bonito y que nunca me volverás a tener como me tuviste" porque los amores de verdad nunca se olvidan pero lo que sí sé que ya lloré demasiado por los dos; el destino nos pondrá en nuestro lugar.

FFT